y para defenderlo le dio una afición

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Han pasado 25 años desde que, con la Ley del Deporte de 1990, el Sevilla Futbol Club se convirtiera en sociedad anónima deportiva, concretamente el 29 de Junio de 1992. En plena Expo92 y en un contexto de recesión que provocó en la segunda mitad de ese año el inicio de una de las peores crisis económicas sufridas en el país, muchos hogares sevillistas respondieron a aquel ultimátum, adquiriendo su testimonial participación de un capital social, que en caso de no suscribirse, dejaría expuesto al interés de cualquier grupo inversor o dudoso mecenas lo que tantos años había costado construir, como ocurrió, desde un primer momento, con muchos de los hasta entonces clubes deportivos.

La respuesta del Sevillismo de base adquiriendo el cincuenta por ciento del capital social en aquel escenario fue sorprendente. Sobre todo teniendo en cuenta que la información que en aquel momento se recibió por parte de la entonces directiva fue cuanto menos escasa. No hubo información detallada de qué suponía convertirse en accionista, ni siquiera una mínima referencia a la naturaleza del capital social a suscribir en relación con el valor patrimonial de la entidad; por supuesto que tampoco había previsto ningún incentivo para el accionista. De los alrededor de 30000 socios de aquel año, a buen seguro, solo un pequeño porcentaje dispondría de unos mínimos conocimientos sobre inversión societaria y para colmo ni aquellas tres acciones iniciales ofertadas a los socios ni las veinte posteriores, adquiridas en una segunda vuelta, posibilitaban participar en el que a partir de entonces sería el principal órgano de gobierno del Sevilla FC, la junta general de accionistas. Por si ello no fuera suficiente, los autodenominados “hombres de pro” del Sevillismo en un ejercicio de “buenismo” proclamaban que el capital se suscribiría al cien por cien aunque no concurrieran las bases.

Pero las bases concurrieron

Concurrieron porque como resuena en el Pizjuán, ellos son los Guardianes de Nevión. Sí, esos que, solo tres años después, respondieron con contundencia y determinación a la locura de un descenso administrativo; los mismos que expulsaron a los dueños y testaferros de aquel paquete maldito o aquellos que impidieron el nefasto acuerdo con aquel despropósito político llamado estadio olímpico. Siempre concurrió el Sevillismo, auténtico dueño de esta realidad con mas de cien años de historia, por el que merece la pena seguir trabajando para colocarlo en el lugar que merece en las estructuras del Club.

Veinticinco años después, vivimos momentos de gloria deportiva que nos han aupado a las alturas del ranking UEFA por encima de Clubes con un presupuesto muy superior. El nombre del Sevilla FC es mundialmente reconocido. El londinense The Sun sitúa al Sevilla FC en el puesto diecinueve de los clubes mas valiosos del mundo con un valor de 190 millones de libras. KPMG,reconocida firma que ha conseguido en 2017 el mayor numero de empresas del IBEX a auditar, lo valora en 261 millones de euros, que lo sitúa en el puesto treinta de los clubes europeos mas valiosos en relación con cinco características (rentabilidad, popularidad, propiedad del estadio, derechos de emisión y potencial deportivo). Según Brand Finance, empresa líder en consultoría estratégica, el valor de la marca “Sevilla FC” ha crecido desde los 49 millones de euros en 2014 a 125 en 2017.

Estos datos, que nos hacen sentir orgullo del prestigio alcanzado tanto deportiva como institucionalmente, también implican la exposición del Sevilla FC al interés de inversores absolutamente ajenos al Sevillismo, lo que supone el punto de partida de un importante trabajo por desarrollar para garantizar la estabilidad societaria, la defensa de las bases del Sevillismo y el posicionamiento activo del pequeño accionariado como propietario, actualmente, del cuarenta por ciento del capital social.

Por ello, seguimos trabajando para que la posición accionarial del Sevillismo de base se mantenga y concurra ahora, con la fuerza que le otorga la unión de sus acciones, a los órganos de decisión del Sevilla FC.

Por ello, seguimos trabajando para que la fuerza accionarial del Sevillismo de base no se diluya procurando canales que permitan su distribución entre pequeños accionistas.

Por ello, seguimos trabajando, para que contigo el Pacto por el Sevilla” sea una realidad que garantice un Sevilla de los Sevillistas y cierre la posibilidad a la entrada de capital ajeno a nuestros sentimientos.

Por ello, te pedimos que si deseas sumarte al “Pacto por el Sevilla” te pongas en contacto con nosotros, a través de e-correo, del cuestionario de esta web o visitándonos en la Peña Sevillista Al Relente durante la previa de los partidos en el Pizjuán.

Son tantas las razones para unir la fuerza accionarial del Sevillismo de base que podrían resumirse en una, que se escucha cada partido por el Sánchez Pizjuán.......”Y para defenderlo le dio una afición.....”